10 preguntas y respuestas sobre la seca
3 de junio
Hoy hablamos de uno de los grandes problemas que afectan a los árboles de nuestras dehesas.
¿Qué es la seca?
El término seca hace referencia, de manera muy general, al decaimiento y muerte que se observa en las quercíneas (encinas, alcornoques, etc.) de nuestras dehesas, y que se manifiesta en la parte aérea de los árboles.
¿Cuáles son sus síntomas?
El termino seca fue acuñado, precisamente, porque los árboles afectados presentaban una serie de síntomas inespecíficos similares a los que produce la sequía: pérdida de hojas, muerte de brotes y ramas, etc. El resultado es el deterioro progresivo del árbol que puede acabar con a la muerte, que a veces se produce de forma súbita, si bien pueden transcurrir muchos años entre la aparición de los primeros síntomas visibles y el fallecimiento.
¿Cuál es el origen de la seca?
Se considera como el resultado de la acción de múltiples factores: envejecimiento del arbolado, plagas, cambio climático… Todas estas variables interactúan entre sí: por ejemplo, los cambios meteorológicos ligados al cambio climático pueden hacer que organismos que estaban en equilibrio en el ecosistema se conviertan en plagas.
Existen, por tanto, muchas situaciones distintas que se engloban bajo el término general ‘seca’. En el caso de las dehesas de la península ibérica, un elevado porcentaje de los brotes de seca están asociados a la infección por Phytophtora cinnamomi (fitóftora), un patógeno muy agresivo.
¿Fitóftora es un hongo?
No, en realidad fitóftora es un Oomycete. Se les llama también pseudohongos por su apariencia semejante a estos, aunque en cierto modo son organismos más próximos a algunos grupos de algas que a los auténticos hongos.
¿Cómo actúa fitóftora?
Fitóftora causa podredumbre radical, ya que ataca a las raicillas más finas de la planta, encargadas de tomar agua y nutrientes. A medida que van muriendo las raíces, el árbol ve comprometido su abastecimiento y empiezan a aparecer los síntomas visibles en la parte aérea.
El problema es que estos síntomas aparecen cuando la infección ya se encuentra en un estado muy avanzado, lo que dificulta mucho la detección temprana de los focos.
¿Cómo es su ciclo biológico?
En condiciones favorables de humedad, las masas vegetativas de fitóftora alojadas en las raíces producen estructuras reproductivas que liberan al suelo esporas con capacidad de movimiento mediante dos flagelos.
Si el suelo está seco, se formarán unas estructuras de resistencia que pueden ser viables durante varios meses y que germinarán para producir nuevas zoosporas cuando las condiciones de humedad vuelvan a ser favorables.
¿Cómo se propaga?
Para poder desplazarse y completar su ciclo vital, fitóftora necesita la existencia de una película de agua, aunque sea muy fina. En muchas ocasiones, es habitual observar en zonas sin pendiente cómo el decaimiento se extiende de unos árboles a otros en forma de círculos con cada vez mayor diámetro. Este es un síntoma muy típico de las infecciones por hongos.
¿Hay tratamiento?
En primer lugar es necesario identificar el origen de la seca. La única manera de tener completa seguridad de que se trata de infección por fitóftora es identificar el patógeno mediante secuenciación genética, si bien existen otros test de diagnóstico, como sucede con la covid-19, que pueden ofrecer de forma rápida una evaluación preliminar.
Actualmente no existe un tratamiento definitivo que permita erradicar el patógeno, aunque se está trabajando en algunos métodos de control con resultados aceptables, por ejemplo la inyección de fungicidas específicos en el tronco de los árboles o la aplicación de enmiendas biológicas.
Por otro lado, también se pueden llevar a cabo distintas medidas de prevención y mitigación para evitar la propagación de los focos.
¿Qué medidas de prevención se pueden adoptar en zonas no infectadas?
Puesto que la humedad es fundamental para la propagación de fitóftora, es fundamental evitar los movimientos de tierra y agua y controlar los encharcamientos. También se puede propiciar la presencia de matorrales en zonas de pendiente para favorecer la infiltración de agua.
Si se realizan repoblaciones, hay que asegurarse de que las plantas proceden de viveros que puedan acreditar el seguimiento de prácticas que minimicen los riesgos. También es necesario establecer una adecuada gestión del arbolado y evitar las podas intensas que lo debiliten.
¿Qué medidas de mitigación se pueden adoptar en zonas con focos de seca?
Es necesario delimitar bien los focos y reducir la presencia de personas y animales en los mismos, ya que el patógeno se puede propagar a través de las herramientas o las pezuñas del ganado. Si es imprescindible introducir el ganado en esta zona, hacerlo cuando el suelo esté seco. También se pueden realizar enmiendas cálcicas y favorecer la presencia de plantas micorrizadas que dificultan el ataque del patógeno.
Más información:
- ‘Recomendaciones para la gestión de la seca causada por fitóftora’. 2020. Centro de Investigaciones Científicas y Tecnológicas de Extremadura (CICYTEX) y el Instituto Nacional de Investigação Agrária e Veterinária (INIAV)
- ‘El decaimiento y la podredumbre radical en las dehesas andaluzas’ (2016) Life Biodehesa. Junta de Andalucía
